Las flores han acompañado al ser humano desde tiempos inmemoriables, tanto el rituales como en la elaboración de elementos decorativos o como obsequio.Esto tiene mucho que ver con el hecho de que las flores no solamente hayan sido capaz de llamar nuestra atención con sus formas y sus colores, sino también porque tienen la capacidad de transmitir cualquier sentimiento emoción sin decir una sola palabra. Por este motivo, son muchos los que hoy deciden enviar flores a domicilio a sus familiares y amigos, con el objetivo de demostrarles su afecto, pero también para mostrar apoyo, agradecimiento o pedir perdón.
Por lo general, a la hora de elegir las flores tenemos en cuenta tanto nuestros propios gustos como los del destinatario y su personalidad. Y es que, aunque todas las flores son preciosas, hay algunas que encajan mejor con nosotros por diversos motivos. Por eso, además de expresar sentimientos, las flores son un reflejo de nuestra personalidad, lo cual se hace más evidente cuando las elegimos para decorar nuestro hogar. Y lo más curioso es que apenas somos conscientes de ello.
