Todas las plantas son relevantes para limpiar el aire pero, unas más que otras ayudan a que espacios cerrados como nuestras casas u oficinas tengan un ambiente más purificado. El aire que se encuentra en estos espacios está lleno de toxinas y contaminantes que emergen de distintos productos que usamos y con los que estamos en contacto diariamente.
Las plantas filtran los agentes tóxicos, los metales pesados y los hidrocarburos presentes en aire, suelo y agua. Concentran en sus hojas los agentes contaminantes y junto con algunos microorganismos los neutralizan.
Algunos de los tóxicos o contaminantes a los que estamos expuestos en nuestros hogares y puestos de trabajo:
- Formaldehídos: Aglomerado o productos de madera prensada, alfombras, productos hidrófugos, productos ignífugos, gas natural, keroseno, humo de tabaco.
- Benceno: Se usa para hacer plásticos, resinas, pesticidas, detergentes, etc. También se encuentra en el humo del cigarro y en el humo del escape de los vehículos.
- Tricloroetileno: Se encuentra en tintas de impresoras, pinturas, lacas, barnices, adhesivos, etc.
- Xileno: Se encuentra en impresos, goma, cuero, humo de cigarro y escape de vehículos.
- Amoniaco: Se encuentra en limpiadores para pisos y fertilizantes, entre otros.
Tal es la importancia de las plantas en nuestras vidas y nuestros hogares, que la NASA realizó un estudio sobre cuales eran las plantas más eficaces limpiando y filtrando los agentes contaminantes que hay en el aire ayudando a dejarlo más puro. Algunas de las plantas que aparecen en el listado que publicó la NASA son las siguientes:
- Rhapis Excelsa (rapis, palmerita china o palma bambú): Ayuda a neutralizar formaldehído, xileno y amoniaco.
- Dracaena Fragrans (tronco del Brasil): Ayuda a neutralizar tricloro, flormaldehído y xileno.
- Hedera Helix (hiedra común): Ayuda a neutralizar tricloro, formaldehído, xileno y benceno.
- Sansevieria Trifasciata (lengua de tigre): Ayuda a neutralizar tricloro, formaldehído, xileno y benceno.
- Dracaena Marginata (drácena de hoja fina): Ayuda a neutralizar tricloro, formaldehído, benceno y xileno.
- Spathiphyllum (espatifilo): Ayuda a neutralizar tricloro, xileno, benceno, formaldehído y amoniaco.
- Phoenix Roebelenii (palmera enana): Ayuda a neutralizar formaldehído y xileno.
- Chlorophytum comosum (cinta): Ayudan a neutralizar formaldehído y xileno.
- Chamaedorea (camadorea o palmera de salón): Ayudan a neutralizar formaldehído y xileno.
- Ficus Robusta (árbol de caucho): Ayudan a neutralizar formaldehído y xileno.
- Epipremnum Aureum (potos): Ayudan a neutralizar formaldehído, xileno y amoniaco.
- Anthurium andreanum (anturio): Ayudan a neutralizar formaldehído, xileno y amoniaco.
Como podéis comprobar, el Espatifilo es una de las plantas más completas a la hora de ayudarnos a combatir y neutralizar algunos de los tóxicos con los que tenemos que convivir diariamente, por lo que dedicaremos una entrada a explicar los cuidados necesarios de la misma.
En una entrada anterior os comentábamos las propiedades medicinales de algunas especies de Kalanchoe. Hay otras especies que carecen de estas propiedades y son meramente ornamentales.
La variedad de Kalanchoe más común y que suele encontrarse en floristerias y viveros es el Kalanchoe Blossfeldiana y Kalanchoe Calandiva (este último es una variedad obtenida del blossfeldiana), planta ornamental de interior y/o jardín (dependiendo del clima) muy popular debido a su fácil cuidado y a la gran variedad de colores de sus flores.
Dentro de casa deberemos de ubicarla en un lugar muy luminoso y soleado. En el exterior hay que plantarla al abrigo del sol directo y deberemos de tener en cuenta que no tolera temperaturas muy bajas, siendo por debajo de los 10º C perjudiciales para la planta. La temperatura ideal para su cultivo se encuentra entre los 20º y 27º C.
Al tratarse de una planta crasa con sus propias reservas de agua en sus hojas no requiere muchos riegos, hay que dejar secar el sustrato parcialmente entre riego y riego.
Hoy veremos las propiedades medicinales del Kalanchoe.
Los kalanchoe son un género de plantas, con alrededor de 125 especies, de la familia crassulaceae.
Actualmente sus hojas se están utilizando popular y eficazmente para el tratamiento contra el cáncer, ya que contienen un compuesto orgánico que logra detener la propagación de las células cancerosas.
Sus propiedades medicinales son muy conocidas en América Latina, Asia y África.
Son tres las especies de kalanchoe a las que se les atribuye estas propiedades, bien sean ingiriendo el jugo de sus hojas o aplicadas de manera externa, ya que a parte de su uso contra el cáncer también son utilizadas para curar heridas de difícil cicatrización o zonas gangrenadas.
Estas tres especies a las que hacen referencia varios artículos son las siguientes:
- Kalanchoe Pinnata (Bryophyllumpinnatum), comunmente llamado «hoja del aire». Sus flores se pueden encontrar de color verdoso, amarillento o rojizo, acomodadas en grupos sobre largas inflorescencias. Los frutos son alargados y pequeños.
- Kalanchoe Daigremontiana (Bryophyllumdaigremontianum), llamada vulgarmente «aranto» o «espinazo del diablo». Esta planta tiene la característica de producir brotes de nuevas plantulas a lo largo del margen de sus hojas, que se desprenden y emiten raíces fácilmente al caer al suelo. Sus flores son pequeñas y acampanadas de color rosa. Esta especie está catalogada como planta invasora en muchos países, por lo que se recomienda tener en cuenta para evitar su excesiva propagación.
- Kalanchoe Gastonis-Bonnieri (Bryophylumgastonis-bonnieri). Esta planta tiene las hojas más grandes, popularmente llamada «oreja de burro» y «planta de la vida». Como muchos otros componentes del género produce en la punta de las hojas plantitas mediante las cuales ella misma se auto reproduce. En época de floración portan en sus cúspides manojos de flores tubulares colgantes de color rosáceo.
A estas tres especies, como ya hemos comentado anteriormente, se les atribuyen propiedades medicinales para tratar diferentes problemas de salud, entre los que se encuentran:
- Lesiones y enfermedades relacionadas con daños celulares, como el cáncer.
- Heridas profundas y gangrenadas.
- Infecciones y quemaduras.
- Tumores y abcesos.
- Reumatismo e inflamaciones.
- Hipertensión.
- Piedras en el riñon.
- Diarreas.
- Enfermedades psicológicas (esquizofrenia, crisis de pánico y miedos).
Para tratar estas distintas afecciones las hojas de kalanchoe se puden comer crudas en ensalada, beber su jugo o elaborar infusiones. La dosis recomendada es de 30 g. diarios.
Para uso externo, se mezcla el jugo con con aceite o vaselina para formar una pasta, la cual se aplicará posteriormente en la zona a tratar.
IMPORTANTE, Toxicidad del Kalanchoe y Contraindicaciones:
No debe utilizarse durante el embarazo ya que puede estimular el útero. No conviene usar la planta de forma continuada por largos periodos de tiempo si no se debe hacer ningún tratamiento.
Su composición incluye bufadienolidos, que son glucósidos cardiacos, por lo que pacientes que han sufrido enfermedades cardiacas deberán de consultar con su médico.
Es tóxico para perros y gatos.
La investigación clínica efectuada sobre las kalanchoe indica que puede haber toxidad si se abusa de la planta y señala que hasta dosis de 5 gramos de planta por kilo de peso no hay toxicidad (esto sería unos 350 gramos de hoja por una persona de 70 kilos). No obstante la dosis diaria recomendada es 10 veces inferior a esa cantidad (30 gramos de hoja en varias tomas).
Aconsejamos que consulte con su médico antes de comenzar cualquier tratamiento con las kalanchoe.